Tomando en cuenta la localía racinguista, repasaremos cinco partidos inolvidables por diferentes razones. Incluye, como excepción, el último choque que los enfrentó en San Luis, en campo neutral, y que terminó en escándalo. En este caso, arrancamos por un torneo muy distinto a los anteriores, el campeonato oficial de 1949.
En las últimas cinco jornadas de 1948 se produjo una huelga general de jugadores de fútbol, que obligó a los clubes a disputarlas con juveniles sin contrato. Eso provocó el éxodo de muchos profesionales al exterior y sirvió para que los futbolistas tuvieron algunos derechos que nunca habían sido reconocidos.
Durante 1948, los partidos fueron dirigidos, en su totalidad, por jueces británicos, con mayoría de ingleses. Eso significó que la AFA hiciera algo hasta entonces impensado: desde el día 26 de junio de 1949 se pusieron números a las camisetas de los futbolistas, por una sugerencia de los árbitros que habían llegado en barco hasta Buenos Aires. Con los jueces ingleses, se triplicó la cantidad de penales sancionados en el certamen.
Racing 6 – Boca 2 (1949)
Undécima fecha del torneo. Racing tenía su futuro Cilindro en construcción y hacía de local en La Boca o Boedo. Venía de ganarle 5-2 a Independiente en el templo rojo y recibió a un Boca, que estaba penúltimo y haría la peor campaña de su historia. De hecho, el cuadro auriazul se salvaría del descenso en la última fecha al derrotar a Lanús.
Local en San Lorenzo, la diferencia de juego entre ambos fue enorme y el 4-0 que consiguió Racing al final del PT definió el clásico. Tres goles de Llamil Simes y uno de Rubén Bravo estamparon un resultado llamativo. En el complemento, Eduardo Ricagni y un penal que concretó Isaac Scliar acercaron al xeneize, pero de nuevo Simes y Bravo le dieron forma a una goleada memorable. El entreala izquierdo Simes fue el goleador del torneo con 26 tantos.
River fue puntero hasta que Racing lo venció en el Monumental. Los Millonarios y Platense fueron los otros dos animadores del torneo, aunque la Academia, que llevaba 24 años sin salir campeón, empezó a despegarse hasta ganarlo con seis puntos de ventaja sobre los dos vecinos de Núñez. Boca fue la contracara, perdió 17 partidos de 34 y zafó de irse a Primera B en la última jornada.
Racing 3 – Boca 2 (1966)
Racing fue el campeón de 1966 con un equipo memorable que quedó en el recuerdo de todo el fútbol argentino. Armado por Juan José Pizzuti durante el torneo de 1965, Racing alcanzó la excelencia en la siguiente temporada, al punto de mantener un invicto que duró 39 fechas incluyendo la última parte de 1965 y salir campeón tras 24 victorias, 13 empates y una única caída ante River, que fue subcampeón. Ambos sacaron mucha ventaja al tercero, que fue Boca. El 13 de noviembre, en la fecha 35, a cuatro del final, recibió a Boca en Avellaneda.
La Academia se puso en ventaja con un cabezazo de Juan José “Yaya” Rodríguez, que superó a Antonio Roma tras un centro de Humberto Maschio. En el minuto 44 del PT, Alfredo “Tanque” Rojas igualó de la misma forma tras un centro de José Luis Luna. En el sexto minuto del ST, gol de Racing porque el lateral izquierdo Rubén “Panadero” Díaz desvió con su cabeza otro testazo similar de Maschio y venció el arco boquense. Fue un partido visto por muchísima gente ya que fue televisado en directo para todo el país.
Tres minutos después, tiro de esquina de Silvio Marzolini al área local, dudas de Perfumo y Basile -los zagueros racinguistas- y definición perfecta del Tanque Rojas, maestro del cabezazo, cuarto gol conquistado de la misma forma. Racing necesitaba la victoria para ponerse a un punto del título -el anterior lo había ganado en 1961- y lo consiguió a los 42 del ST, gracias al santiagueño Juan Carlos Cárdenas, el popular “Chango”, que capturó el pase largo del puntero derecho Martinoli y derrotó a Roma con un derechazo alto. Fiesta popular en Avellaneda y un título que llegaría siete días después con el empate ante Gimnasia en el Bosque. Desde allí hasta un nuevo título local en 2001 pasarían 35 años.
Racing 3 – Boca 4 (1975)
El Metropolitano de 1975 es especialmente recordado por los hinchas de River, que consiguió ganarlo tras 18 años sin títulos, un suplicio que lo dejó muchas veces segundo o eliminado antes de tiempo. Ese año, el Millonario sacó ventaja desde el inicio y apenas fue asustado por Boca, que a pocas fechas del final se le puso cerca, pero no lo alcanzó. Boca fue muy irregular, pero el 28 de junio, a once partidos del desenlace del campeonato, produjo un milagro todavía recordado. Lo hizo contra Racing, en Avellaneda.
La Academia tuvo ese año un equipo descompensado. Buenos delanteros como Hugo Gottardi, Néstor Scotta y Roberto Díaz, además del Pampa Jorge, un fino entreala izquierdo, pero una defensa muy floja, que cerraría el torneo recibiendo 91 goles en contra, la peor retaguardia de los veinte equipos que jugaron en aquel Metropolitano.
A los 24′, gol de Hugo Gottardi sorprendiendo a Vidallé, el arquero boquense. Dos minutos después el juez Oscar Veiró cobró penal para Boca, lo pateó el defensor Nicolau y el pibe Carlos Suárez se lo tapó. Réplica local, zurdazo perfecto de Jorge y 2-0, que el mismo jugador ampliaría con un delicioso tiro libre a los 38′. Final del PT con un Racing contundente. Fiesta académica con un sorprendente 3-0.
En el complemento, la defensa racinguista cometió un error tras otro. Gol de Boca a los 5′ del ST, porque Nicolau concretó otro penal, esta vez cobrado por falta de Brites a Osvaldo Potente. A los 17 llegó el segundo de los visitantes, cuando el puntero mendocino Darío Felman estampó su zurda. El partido cambió radicalmente. El entrenador Rogelio Domínguez mandó a la cancha al correntino Hugo Paulino Sánchez por Abel Alves y Boca se vino encima de Racing.
Sin embargo, a los 36 Nicolau lo bajó al Tola Scotta y penal para Racing. Lo tiró Jorge Buzzo, hombre de Selección, pero calculó mal y el remate se fue desviado. Boca se envalentonó: a los 39 lo empató Hugo Paulino Sánchez y cuatro minutos después cabeceó entre varios. La pelota se metió lentamente junto al palo ante la desesperación de Suárez. Del 0-3 al 4-3, una hazaña que sigue siendo recordada por semejante recuperación en cancha ajena. Sánchez, nuevo héroe.
Racing 6 – Boca 0 (1987)
El 20 de septiembre de 1987, se midieron en Avellaneda. Era la cuarta fecha del torneo y la Academia había ganado los tres primeros partidos, con un andar sólido y efectivo. Boca no estaba bien, dos caídas en las tres jornadas iniciales habían generado dudas sobre el equipo que conducía Roberto Saporiti.
El partido resumió los momentos de cada uno. Racing hizo lo que quiso y construyó una goleada que pudo ser mayor todavía. A los 6′ Wálter Fernández lanzó un centro alto desde la izquierda, no reaccionó el fondo boquense y José Toti Iglesias superó a Hugo Gatti con un cabezazo corto. Quince minutos después, otra pelota llovida desde el mismo sector y el anticipo de Miguel Colombatti para estampar 2-0 con otro cabezazo.
Sin Abramovich -expulsado por agresión a Iglesias- el ST fue imposible de sostener para Boca, que recibió el tercer cabezazo mortal por Medina Bello tras el enésimo centro desde la izquierda. Cuatro minutos después repitió el Toti Iglesias empujando con zurda un desborde del Mencho, el quinto lo hizo Colombatti tras un rebote en el travesaño de Wálter Fernández y la pasividad de Gatti, para cerrar la goleada histórica Jorge Acuña con otro cabezazo, el cuarto gol hecho de esa manera. Fue la primera y única vez que Racing le ganó 6-0 a Boca.
Racing 2 – Boca 1 (2022)
El Trofeo de Campeones se jugó el 6 de noviembre de 2022 en La Pedrera de Villa Mercedes, San Luis. Allí llegaron acompañados por muchísimos hinchas y el primer tiempo tuvo una ráfaga de buen juego y goles. Primero golpeó Boca, cuando Norberto Briasco bajó la pelota con clase y definió con un zurdazo esquinado. Tres minutos después, el paraguayo Matías Rojas tomó la pelota en mitad de cancha, se movió de izquierda a derecha y sacó un zurdazo a media altura, muy violento, que dobló las manos del arquero boquense Rossi.
El segundo tiempo lo jugaron a cara de perro, ambos tuvieron sus chances, Arias salvó el arco albiceleste y el poste evitó el gol de Racing. El juez Facundo Tello expulsó a Carbonero y a Villa por empujarse, cerca del final. Llegó el tiempo suplementario y Varela dejó a Boca con nueve hombres por doble tarjeta amarilla. Nerviosos los dos, Racing atacó más a base de centros desde la izquierda. Lanzó Piovi, a dos minutos del final y Carlos Alcaraz metió la cabeza para superar a Rossi con ese lanzamiento esquinado.
Racing se puso 2-1 y Alcaraz generó violencia al gritarle el gol con gestos impropios al público de Boca. Se le fueron encima los jugadores boquenses y tras la gresca, con trompadas y patadas incluidas, llegaron las expulsiones: Alcaraz el primero, después Advíncula, Zambrano, Jonathan Galván y en el pequeño lapso de juego también se fueron Fabra y Benedetto. Al no contar Boca siete jugadores en cancha, Tello dio por finalizado el partido. Racing ganó el trofeo, pero perdió el fútbol después de un final vergonzoso.