El campeonato de Primera A de 1938 lo jugaron 17 equipos, todos contra todos, en dos ruedas. Lo ganó Independiente con 53 puntos, dos más que River. Tercero fue San Lorenzo, cuarto Racing y el quinto puesto lo compartieron Gimnasia, Boca y Estudiantes. Hubo dos descensos directos, por segundo año consecutivo. Si en 1937 les tocó a Quilmes y Argentinos Juniors -los primeros del profesionalismo- para 1938 el retroceso les llegó a Almagro (que recién había ascendido) y a Talleres de Remedios de Escalada, que nunca volvería a jugar en la A.
Lo importante del torneo de 1938 fueron los goles convertidos: 1334 en 272 partidos, lo que significa un promedio de 4,90 goles por partido. Impresionante.
Independiente hizo 115 goles, River convirtió 105 y Racing 102, los únicos tres que pasaron el centenar. Después vienen San Lorenzo (87), Huracán (85) y Platense (84). Las peores defensas fueron Talleres RE (103), Tigre (102) y Platense (100), seguidos de Lanús (95), Almagro (94) y Chacarita (92).
El goleador del campeonato fue Arsenio Erico, que hizo 43 de los 115 tantos rojos, diez más que Luis Rongo, delantero de River que metió 33 y once más que Florencio Caffaratti, de Vélez, que conquistó 32.
Quince futbolistas hicieron 20 goles o más en ese torneo, que tuvo en 272 partidos, solamente cuatro partidos empatados sin tantos: Atlanta-Racing, Boca-Gimnasia, Talleres RE-Vélez y Tigre-Independiente.
Como local en Avellaneda, Independiente le ganó 9-0 a Almagro, 9-2 a Chacarita, 8-2 a Lanús, 7-1 a Vélez, 6-1 a Ferro y 6-2 a Tigre. De visita, su mejor registro fue un 5-2 a Platense en Manuela Pedraza y Crámer.
El escolta River vapuleó como visitante 8-1 a Estudiantes de La Plata, mientras que Racing consiguió 24 goles en tres partidos seguidos, ganándole 8-2 a Platense, 8-2 al pincha en La Plata y 8-1 a Lanús, algo que se supone imposible de repetir.
El otro detalle increíble es que Talleres, el último del campeonato, consiguió marcar 55 goles a favor en las 32 fechas. Viene a cuento porque casi treinta años después Boca, el campeón de 1965, convirtió la misma cantidad de goles incluso habiendo jugado dos partidos más que aquel débil Talleres. Los esquemas defensivos y las tácticas cautelosas habían hecho lo suyo.
Otros resultados llamativos: River-San Lorenzo y Platense-Racing empataron 5-5, Vélez goleó 7-2 a Huracán que superó en Escalada 7-2 a Talleres, que venció 5-1 a Atlanta, que derrotó 1-0 al campeón rojo en Avellaneda.
Un torneo inolvidable con goles y cracks para todos los gustos. Irrepetible. Mientras tanto se había jugado la tercera Copa del Mundo en Francia y la Argentina, ofendida porque no le dieron la sede del torneo, decidió no concurrir en señal de protesta…